La boda real de Meghan y Harry
Tengo que reconocer que me había olvidado de la boda real de Meghan y Harry hasta que empezaron a sonar los Whatsapps del grupo de amigos.
-Están llegando los invitados…
-A que hora es la misa? ¡Avisarme para ver a la novia!
“Menuda blogger de pacotilla” pensé, te olvidas de la boda real y quedas con tu grupo de amigos para irte a comer marisquito… deberías de estar pegada al televisor y comentar la boda! Pero me había prometido no llegar tarde, habíamos quedado a las 12:30 h y eran las 11:30 h.
Entre a Instagram para subir una foto de la decoración floral. Me encantó y no paraba de preguntarme cuánto se habrían gastado en ella y cuántas novias irían con la foto a la florista pidiendo algo así. Totalmente inspirador. Impresionantemente bonito.
Instagram tiene en mí efecto hipnotizador, estoy convencida que el reloj empieza a correr más deprisa para hacerme la putada del siglo porque no es normal que pase el tiempo tan rápido mientras cotilleo las cuentas que sigo.
Al final deprisa y corriendo me meto en la ducha, suerte que había elegido el modelito la noche anterior. Pero llegué tarde, como siempre.
Kate, muy mal
De camino al restaurante seguimos hablando en el grupo de Whatsapp, algunas del grupo iban tan solo unos metros más adelante en otro coche pero teníamos que comentar la actualidad.
Empiezo a gastar datos a saco, de hecho, me quedo sin ellos. Me meto a ver la boda en directo y justo está llegando Kate con el cortejo real.
¿Perdona? ¿De blanco? Ahora sé que es un amarillo empolvado, pero me da igual. Me pareció fatal que fuese con un vestido / abrigo tan clarito. Además, repite por cuarta vez? No procede. Estoy a favor de que se repitan modelitos pero no era el día ni el momento. De verdad que no. Estoy de acuerdo que no le quiera quitar protagonismo a la novia pero así no amiga, así no. ¡Ni que se casara tu vecina del quinto!
En el grupo empezamos a comentar sobre la Leti, estábamos intrigadas con su modelito pero después ya nos enteramos que no fue por no ser los novios herederos a la corona. Vaya… nuestro gozo en un pozo. Ya no podíamos cotillear sobre la reina.
Eso sí, los ingleses fueron todos: Los Beckham, Elton John…
Llega la novia
Y lo primero que me llama la atención es que ¡no lleva ramo! Se lo dan después, al acabar de subir las escaleras. No vaya a ser que se caiga la pobre, bastante en tensión estará ya. Y tenía que subirse el vestido para no tropezar.
Me pareció un ramo muy pequeño y soso, de primeras fue lo que menos me gustó. Me imaginaba algo más especial. Nada de colores, en blanco y verde, pero más grande. Mucho más grande. Después leí que el ramo tenía nomeolvides (las flores preferidas de Diana) y que alguna flor las había recogido Harry personalmente en el jardín de su abuela y entregado a la florista para que las incorporara en el ramo. En el momento que leí esta historia pasó a parecerme el ramo más bonito del mundo mundial. Soy así de romanticona, sí.
A mis amigas no les convence el velo. A mí me encanta toda ella. Podría haber arriesgado un poquito más. Pero al ser una boda real hay que ir sobre seguro y lo ha bordado. Vestido totalmente blanco, con manga francesa y cuello barco. Eso sí, quizás le quedaba un poco holgado en el pecho, yo se lo hubiese ceñido un poquito más.
Y el maquillaje? Piel transparente dejando ver sus pecas, ahumado sutil y labio neutral. Una señal más de su sencillez, qué natural es y como me encanta que sea así! Ella era sin duda el accesorio que más brillaba. No necesitaba nada más.
La misa
Comienza la música en la capilla de St. George. Va a entrar la novia. El niño que está justo detrás nos representa a todos. Se le pone una cara de emoción que me provoca un ataque de risa. Y me recuerda a Macaulay Culkin en “Solo en casa”.
Medio recorrido lo hace sola. Después la acompaña hasta el altar el príncipe Carlos.
No puedo evitar recordarme de Lady Di y me emociono. Cuánta falta nos hace una madre en momentos así y a Guillermo y a Harry les ha faltado desde muy temprana edad. Lo que habrían pagado por tenerla ahí y cuánto hubiese disfrutado ella. Su hijo se casaba por amor, con una chica divorciada, actriz y de raíces africanas. Impensable cuando ella contrajo matrimonio con el príncipe Carlos en 1981. Además, hubiese aconsejado a Kate y os aseguro que no hubiese ido con ese vestido.
Eso sí, me ha encantado que leyese su hermana, la tía de Harry y Guillermo.
Y la madre de la novia? Emocionada, sola, en su trono particular, viendo como se casaba su hija. Me ha provocado mucha ternura. Tampoco dejó su personalidad de lado y a pesar de ser una boda real no se quitó el piercing de la nariz. El look muy correcto, ha estado a la altura.
Quédate con el que te mire como Harry a Meghan
Eso es así. Es como si en medio de todo lo mediático estuviesen solo ellos dos. Sus miradas cómplices….ese “You look amazing – I´m so lucky” … y ella muy tierna, con esa sonrisa tan dulce, mirando a su Harry con tanto amor.. ese coro gospel cantando “Stand by me” para darse el “Sí, quiero!” – ¡MOMENTAZOS!
Momento votos: digo yo, que podrían habérselos aprendido de memoria, no? Sin tener que repetir lo que decía el sacerdote. Siendo ella actriz no debería de suponer mucho esfuerzo. Nuestra Leti al menos se los había aprendido.
Menú
Llegamos al restaurante. Y pienso; ya les gustaría a la boda real comer el menú que acabamos de pedir:
Cigalas, camarones, percebes, nécoras, langostinos, centolla, navajas, almejas y por si fuese poco, segundo plato (en mi caso rape) y postre! Siento curiosidad y busco el menú nupcial y veo que han servido un cóctel de pié de canapés variados. Me da la risa. Si llegan a venir a una boda gallega salen rodando.
La invitada perfecta
La invitada perfecta la tuve clara desde el minuto uno, Amal Clooney. Puede que me sienta influenciada por el color, adoro el amarillo desde siempre, pero no podemos negar que iba impecable. Después, viendo fotos en Instagram he visto que @charuca lo ha tuneado con lunares blancos y cinturón negro y he de decir que hubiese sido todo un acierto.
La peor, bueno no, la peor no. Las ha habido bastante peores, pero no me ha gustado nada Victoria Beckham. Muy oscuro… pensaría que iba al funeral de la reina madre? Además, ya ha elegido el mismo color en la boda de Kate y Guillermo, será que cree que le favorece. Eso sí, al ir al lado de David Beckham eclipsándolo todo… quien se va a fijar en ella? Ayyyy David.. ¡qué espectacular estabas amigo!
Me ha encantado Isabel II
A ver.. no muero de amor con su modelito, las cosas como son. Siempre va igual, con su abrigo y su tocado, pero que a su edad la reina madre apueste por colores vivos merece mis respetos.
Otro de los momentazos fue cuando Harry le comenta disimuladamente a Meghan que ya estaba preparado para beber cuando recorrían las calles de Windsor convertidos en marido y mujer.
Segundo vestido
Después por la tarde, ya en casa, veo el segundo vestido y me quedo sin palabras. IM-PRE-SIO-NAN-TE!! Muy de mi estilo con cuello halter, siempre me ha encantado este tipo de corte. No pudo haber elegido mejor, de hecho, apostaría a decir que se hubiese casado con algo así. Ella es fiel a su estilo, sencilla, menos es más, y lo ha bordado.
El coche, en el que se trasladan a la fiesta, es un Jaguar del año 1968 en color celeste. La matrícula del coche llevaba la fecha de la boda, una señal más, de que han cuidado hasta el más mínimo detalle.
Meghan en su mano derecha llevaba un anillo aguamarina que perteneció a Lady Di. Otro guiño a la gran Diana que me ha encantado.
He leído que no se van de luna de miel, al menos, de momento. No me extraña, tendrán que recuperar el bolsillo después de semejante decoración floral… jajaja.
Y por último
Tenemos la lámina de la #consejofamily, con la frase “Te volvería a decir que sí un millón de veces más”. No dudes en descargarla en este enlace, formar parte de la #consejofamily y enterarte de todas las novedades del blog. Si subes una foto a las redes utiliza el hashtag #laminadelconsejo para poder verla :). Me hará mucha ilusión.
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El próximo lunes volveré con más consejos e ideas para tu boda, mientras tanto puedes seguirme la pista por mis redes sociales 😉 ( Faceboook / Instagram )
Un beso,
Silvia L.
Estoy totalmente de acuerdo con todo lo que dices en el blog pero añadiría que en pelquero tampoco gasto mucho. El pelo se le salía por los lados un poco. Gracias por comentar la boda de forma tan chula me ha encantado! 😘
Pero eso la hace más natural si cabe, a mí me ha encantado 😍 Me alegra que te guste al artículo, muchas gracias!!!!